Marta Navarro Garrote
Llevaba 6 años alquilando mi piso de recién casada, que se nos quedó pequeño al aumentar la familia. Siempre lo había alquilado directamente a los inquilinos, huyendo de las inmobiliarias ya que no me inspiraban ninguna confianza, ni consideraba que sus servicios fueran de utilidad. Esta opinión cambió radicalmente al conocer a Cassana Inmobiliaria. Alquilé mi vivienda en dos semanas. La elección de los inquilinos, que para mí era lo fundamental, fue muy acertada. Es una empresa profesional y digna de toda confianza.